domingo, 20 de marzo de 2011

...a 19 de Marzo.

Hoy es el santo de José y dicen que por consiguiente el día del padre, no sé si será un invento comercial, pero salvando las distancias y a pesar de que seas Fernando, hoy mi blog va dedicado a mi San José.
Miles de recuerdos me vienen a la mente, cuando comenzaba a caminar siempre iba de tu dedo meñique, antes como no lo hacía ,tenia la mejor vista de todas, pues iba en tus hombros.
Junto a mí, están tus otros dos toritos de miura, recuerdo tu forma ordenada de darnos la merienda, tres bocadillos y tres zumos, cada uno de su especialidad, queso azul y jamón york es el mío, que ya sabemos lo especial que es el mediano con los sabores fuertes.
Recuerdo los malabares que hacías cuando solo quedaban dos porciones de postre, repartías los trozos de dos en tres, y mediante un sorteo casi ante notario, cada uno iba siempre en busca de su pedazo más delicioso.
3 de la tarde, te toca volvernos a llevar al cole, tu hija siempre ha sido un poco trasto y tocaba peinarla, eres hombre y padre y con el mismo peine masculino, de esos que lleváis en el bolsillo interior de la chaqueta, después de mis dos hermanos, iba yo, con mi coleta despeinada, pero feliz.
Recuerdo como a cada uno de nosotros nos enseñaste a montar en bici, esa famosa bh azul, con y sin ruedines a pasado por los tres. Tengo la imagen del mayor en el patio de casa, del mediano siendo empujado hasta llegar a mamá y por supuesto aun guardo el mío.
Recuerdo el Renault 21 y los veranos en la playa, de banda sonora nos acompañaba una tal bilirrubina de Juan Luis Guerra. Toallas, sombrilla, crema, bañadores de recambio, la nevera, la colchoneta, tumbonas y no olvidar el famoso rastrillo para construir los fuertes, recuerdo que mi hermano mayor, por aquella época era un autentico ingeniero haciéndolos.
Tocaba la hora de irse, como amante de la limpieza, uno por uno impoluto y recién salido del agua nos llevabas al paseo marítimo, ojo no piséis en el suelo repetíais. Alguno de nosotros  tentado por tu paciencia, siempre apoyaba un poquito, pero no pasaba nada, ahí estabas tú con el cubito lleno de agua, dispuesto a lavarnos los pies por segunda, tercera y la veces que hiciera falta.
Recuerdo la primera vez que monte en el metro, fui contigo a los 6 años de edad y en la parada de casa, las horas que te tirabas enseñándome a tirarme de cabeza, o como esperaba en el muro al lado del colegio a que me recogieras del cole, para ir maratonianamente a tenis.
Innumerables son los recuerdos que tengo de mi niñez, adolescencia y de más mayorcita.
De ti admiro tu fuerza de voluntad, me has inculcado que nada es imposible, que yo puedo con todo, me has inculcado a saber estar, a asumir mis responsabilidades, a no dar a los demás lo que yo no quiero.
Tus dichos, tu memoria e intelecto insuperables, tus forma horrorosa de cantar, tus historias de mili… todo ello te hacen eternamente único, así que desde que aquí te deseo que nunca me faltes y que tengas un feliz día Papá. Te quiere tu hija.
http://www.youtube.com/watch?v=R76Abv8-Mbc
http://www.youtube.com/watch?v=RuGiZaaUaj8

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