Recien salida de clase a las 16 horas en punto y sin haber comido, sufro un pequeño trastorno, llego a casa y mi estomago me pide comer y mi cabeza cenar, lo cual produce una pequeña confusión para mi dieta mediterránea.
Este anochecer tempranero, es de lo poco que he encontrado en este país que no me gusta, la oscuridad llega temprano y hace mas largas y desiertas las calles, las flores se mueren antes, las farmacias venden más vitaminas, de la noche a la mañana la melancolía se planta sin llamar.
Las estadísticas nos informan que Finlandia presenta el índice europeo con mayor número de suicidios, de alguna manera lo asocio a esta oscuridad, y lo alcanzo a comprender. Pero no se alarmen, porque esta caida del sol, forma parte de un ciclo de tiempo, y en la vida por suerte o por desgracia, lo único que pasa, es el tiempo. Volverá en moreno a las pieles, la sonrisa a las calles y los niños a los parques.
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